"Al día de hoy es más probable que tengamos que recurrir al proceso de bancarrota", dijo Fritz Henderson, que ha realizado declaraciones similares en las últimas semanas.
El consejero delegado de General Motors, Fritz Henderson, reiteró este lunes que la quiebra de la empresa es "probable", pero aún así señaló que no mejorará la oferta a los tenedores de sus bonos para la restructuración de la deuda.
General Motors (GM) necesita un acuerdo con el 90 por ciento de los dueños de sus títulos hasta el 26 de mayo, o se verá obligado a declarar la bancarrota el 1 de junio.
Esa presión no le hará mejorar los términos del intercambio de títulos, según Henderson, quien afirmó que el Gobierno de Estados Unidos le ha dicho que no podrá dar a los inversores más de un 10 por ciento de las acciones de la nueva compañía.
"No tenemos ningún plan de hacer modificaciones (a la oferta) en este momento", explicó Henderson en una rueda de prensa telefónica.
El plan sobre la mesa prevé que el Gobierno de Estados Unidos se quede con el 50 por ciento de las acciones, en compensación por sus préstamos a GM.
El fondo del seguro de salud de los empleados mantendría otro 39 por ciento de las acciones, los tenedores de bonos un 10 por ciento y los accionistas actuales un 1 por ciento.
Algunos bonistas, que poseen títulos por valor de más de 27.000 millones de dólares, se han quejado de que según esos términos recuperarán un porcentaje mucho menor de su inversión que el fondo de los empleados.
"Al día de hoy es más probable que tengamos que recurrir al proceso de bancarrota", dijo Henderson, que ha realizado declaraciones similares en las últimas semanas.
Al mismo tiempo, enfatizó que "aún hay una posibilidad y una oportunidad de que pueda hacerse fuera de la bancarrota".
General Motors examina actualmente "país por país" la perspectiva de declarar la quiebra de sus operaciones allí.
Henderson dijo que podría declararse en bancarrota global o tan solo en Estados Unidos o América del Norte, y mantener fuera de ella a sus filiales en el resto del mundo.
EFE